21 diciembre 2012

EL REY DEL 4º DERECHA


Mientras me dirigía al apartamento no pude dejar de pensar en él. Edu era un arquitecto de éxito, un esteta con pretensiones. El estallido de la burbuja inmobiliaria y la crisis económica le afectaron de pleno. Habitaba un amplio piso de soltero situado en el centro de la ciudad, el templo de su ego, que incluía un inmenso salón que albergaba la cocina, un baño de generosas dimensiones y dos habitaciones grandes, una utilizada como despacho y la otra como dormitorio con vestidor. Tras mucho tiempo sin recibir encargos, empezó a tener dificultades para llegar a fin de mes y para pagar el alquiler de su fastuoso apartamento. Decidió no confiar a nadie su situación real; sopesó la idea de cambiar de vivienda, pero su orgullo se lo impidió. Había soñado toda su vida con abandonar su barrio e instalarse en el centro. Jamás volvería atrás.
 
Se le ocurrió una solución transitoria aprovechando esa penuria que a él le acechaba: realquilaría, incumpliendo su contrato de arrendamiento, la habitación del despacho. La cosa salió bien, el nuevo inquilino pagaba religiosamente y aceptaba todos los extras que la codicia de Edu maquinaba. Dadas las circunstancias, pensó que podría hacer un poco más de dinero, así que alquiló una cama en una esquina del amplio salón, separándola con biombos. Como nadie ponía pegas y todos estaban encantados de vivir en el centro, los biombos proliferaron por toda la casa, dejando el salón reducido a un sofá y una tele casi pegada a las narices.
 
Todo se encareció paulatinamente, usar la cocina costaba una cantidad según tiempo y hora de uso, así como el baño, la lavadora se puso por las nubes, y los estantes del gran frigorífico eran algo inalcanzable para la mayoría de inquilinos. Los gastos comunes se repartían por un curioso método que incluía intereses leoninos y castigos ejemplares cuando no eran satisfechos. Tras convencer a sus huéspedes de que no abandonasen su nivel de vida, les hacía préstamos con intereses abusivos y penalizaciones incruentas, que más de una vez acabaron con alguno en la calle tras perder su ropa y objetos de valor. Edu, cada vez más alejado del mercado laboral, disfrutaba en su pequeño reino y ahorraba para retomar la agitada vida social que llevó en tiempos. A pesar de no ser propietario, en una reunión de la comunidad de vecinos, tirando de todo el carisma que pudo reunir y de su condición de arquitecto que tuvo nombre, se comprometió a gestionar y coordinar todos los trabajos de mantenimiento y limpieza del edificio, que descargó en sus chicos, la mayoría a cambio de un techo, sin derecho a espacio en el frigorífico ni llave y con dos duchas semanales algunos. Coincidiendo con esta tímida expansión, la economía general empeoraba y las necesidades acuciaban.
 
Así las cosas, el rey del 4ºD, siguió echando gente, quedándose con sus cosas y atrayendo otros inquilinos, mediante discretos y estratégicos anuncios, que ya eran directamente mano de obra barata. Numerosos inmigrantes sin recursos, estudiantes sin becas, empresarios arruinados, parados y divorciados se contaban entre sus víctimas; y entre los sospechosos, me dije, mientras fotografiaba los biombos.
 
 
 
Publicado en el nº146 de la revista de humor on line "El Estafador", dedicado a los compañeros de piso.
 
 

14 diciembre 2012

SONRISA

Siempre he sido una persona sonriente, no lo puedo remediar. A lo largo de los años es algo que me ha granjeado no pocas ventajas (salvo aquel equívoco que me costó el puñetazo), pero últimamente no trae más que desgracias a las desgracias. La noticia del desahucio ha sido, sin duda, lo más duro que me ha ocurrido en mi vida, que desde hace demasiados años no es más que una cuesta arriba sin sentido, sin final. Salarios cada vez más bajos, peores contratos y condiciones de trabajo que tenía que asumir con gesto humilde y agradecido, inestabilidad laboral y una hipoteca que amenazaba mes tras mes hasta que finalmente nos ahogó. Desempleo, intereses, penalizaciones, cantidades que se multiplican, deudas que surgen sin saber de dónde; ayudas, prestaciones y servicios públicos que han formado parte de nuestra existencia que desaparecen de un día para otro, y, finalmente, la imposibilidad real de afrontar los pagos. Mi mujer y los niños en casa de mis suegros y yo con mi madre, avergonzado y hundido. Pero, aún así, la sonrisa vuelve, no lo puedo evitar.
 
El día del desahucio yo no quería estar allí, prefería llevarme las cosas un par de días antes y abandonar la casa. Punto. Pero mi mujer me dijo, entre amenazas de divorcio y llanto, que había que luchar, plantar cara, hacer frente común para presionar al gobierno y a los bancos. Atraer a los medios y responder al apoyo de los manifestantes que acudirían. Estuve allí, claro, triste, violento, expuesto y abatido, abrazado a mis hijos que lloraban; pero casi al final, cuando pasó un antiguo amigo, no pude reprimir una sonrisa al saludarle que sorprendió a todos.
 
Se acerca la Navidad, evidentemente el peor momento de todo este proceso, al no poder ofrecer a nuestros niños ni tan siquiera un hogar propio para recibir y jugar con sus regalos, que serán muchos menos que el año pasado. El programa de la tele, en un acto revolucionario, quiere dedicar en Nochebuena un buen rato a hacer conexiones con familias sin hogar que pasan tan señalada fecha en casas de familiares o incluso refugios. No han hecho casting (sería algo horrible, desde luego), pero sí entrevistas previas a muchas familias. A través de una asociación mi mujer consiguió que nos visitara una reportera del programa. Durante la conversación, tremendamente emotiva, no pude contener algunas sonrisas, e incluso al final solté un inesperado chiste; todos se rieron, pero no nos volvieron a llamar. Mi mujer me ha comunicado esta mañana su intención de divorciarse a primeros de año.  Todo por la sonrisa.
 
 
Publicado en el nº145 de la revista de humor on line "El Estafador", dedicado a los desahucios.

11 diciembre 2012

APAGÓN (EL RELOJ SIGUE DESCONTANDO)


I

 
El apagón.

Recibido con decepción suspirada.

Agitación. Sorpresa ahogada

entre miradas sin destino

tratando de concretar imposibles.

El café no pudo escapar de la cafetera

y los objetos se paralizaron,

flotando en un abismo.

Pero siempre hay velas por prender

para morir hipnotizando.

Una pincelada de luz y una penumbra:

centros del mundo bailando.

Da tiempo:

a ser mordido por presentimientos,

a sonreír antiguas alegrías,

a digerir una ausencia,

a meter el futuro en un círculo,

o a que el pensamiento

se deshaga entre los dedos;

atando cabos que

suavemente se van desatando.

 
II
 

El silencio.

Atrae ecos olvidados de tu voz de antaño,

o acaso son las muchas palabras que no te he dicho,

que me sobrevuelan,

que se mezclan con el mundo de los grillos

y las maderas que gimen.

O acaso son mis pájaros,

cayendo uno a uno dentro de mi cabeza.

El silencio, que va acumulando sobre los hombros

su presencia, su gota fría;

filtrando estertores de impaciencia,

quejidos de ropa atenazada a los cuerpos,

cada uno en el sillón de su miedo.

 
III

 
La quietud.

Frágil,

interrumpida

por los faros de los coches

en Ciudad-Procacidad. 

Exhaladora de alcohol resignado. Cubierta

por infinidad de grillos

suspendidos en el aire. Compuesta

de maderas podridas a punto de ceder

y callejuelas desahuciadas por el trapicheo,

que se disuelven entre meadas

y, envejecidas, muestran los dientes

y sólo ves su vacío mientras

planean una venganza,

convertidas en bocas de lobo difíciles de prever.

 
IV
 

Solo.

Sólo tras el apagón

comencé a oír tu respiración,

y la convertí en mi música.

Sólo tras el apagón comprendí la bruma

Sólo tras el apagón encendí la espuma

Ahora sé que mi aliento transmite calor

a un tiempo acabado.

Ahora sé que todas las piedras

terminan siendo la misma piedra

 
V


La espera.

Esperando que se descascarille la negra pared

¿Hasta dónde puede llegar mi puño?

¿qué puedo romper?

¿qué puedo cambiar?

¿qué grita más fuerte, el odio o el amor?

Extendí mis manos y sentí la libertad,

jugueteando entre mis dedos.

Elevé, tembloroso, las palmas

y sopesé tu presencia

en este agujero.

 
VI
 

Promesa rota

de viaje en sorda espiral azulada,

que se irá desgastando por los bordes

al contacto de tus dedos, siempre tus dedos

luz, que muerdes y hasta aquí me llega tu latir:

potente, rechinante de rectas y contornos afilados.

Luz que chillas, paz carcomida en un segundo.

Luz que vuelves cargada de inútiles mensajes.

Estallando en mis párpados

cuando aún trataban de huir.
 
 
 
Poema publicado en el cuaderno de Creación nº10 de Palimpsesto.

07 diciembre 2012

EL FIN DEL MUNDO SERÁ EN ESPAÑA


Año 2.070: Documentos desclasificados del antiguo Centro Nacional de Inteligencia (CNI).
 

“El descrédito alcanzado en este 2.015 por la totalidad de la clase política española, acusada de inoperancia, sumisión al poder económico y dedicación casi exclusiva a tejer una realidad paralela de intereses propios y componendas, ha desembocado en tal desapego por parte de la ciudadanía que se antoja casi irreversible. Por más que queramos, difícilmente se pueden considerar legítimas ante cualquier observador internacional elecciones, como las recientes municipales,  que cuentan con una participación del 36% en el mejor de los casos y un alarmante porcentaje de votos nulos. Llegados a este punto y ante esta inédita, inesperada y delicada situación de cuestionamiento absoluto del Sistema, susceptible de conducirlo al colapso, con el consiguiente perjuicio para todos, sin contar el daño irreparable a la imagen exterior de nuestro país y a la “Marca España” que tanto orgullo y alegría nos depara, una comisión secreta formada por los líderes de los principales partidos políticos e instituciones financieras de nuestro país, ha decidido afrontar de manera directa y definitiva el problema. Para ello ha elaborado la siguiente hoja de ruta que tiene carácter de secreto de Estado a todos los efectos:
 

Esta comisión, por unanimidad, y tras valorar las distintas opciones puestas sobre la mesa, concretadas en las diferentes subcomisiones de trabajo, ha optado por la nº 1, esto es, propagar de todas las formas posibles y por todos los medios de comunicación a su alcance, la especie de que, según un astrólogo del s. XI (detalles a desarrollar), el fin del mundo se producirá en el momento de mayor esplendor, equilibrio, transparencia y justicia del planeta. La sensación a nivel global de que todo funciona será algo así como la dulce antesala del último día (detalles a desarrollar). Por eso, mientras el mundo sea injusto, desigual y oscuro y haya que seguir sufriendo y luchando para mejorarlo, no se detendrá.”
 

“Valoración del resultado de la comisión: Aceptable.”
 
 
 
Publicado en el nº144 de la revista de humor on line "El Estafador", dedicado al fin del mundo.

04 diciembre 2012

MICRORRELATO (6): BUCLE

El presente era el estruendo del cohete, prendido con un cigarro; el futuro su estallido sordo de color, antesala de caprichosas posibilidades. Y así.