22 junio 2011

Y SÓLO FUIMOS PRINCIPIO

Hubo un día que se abrió
y duró más que ningún día.
Una mañana en que todo creció
y creció sin medida:
sin pausa, sin precaución,
equilibrio o ponderación.
En la que todo renació
sin preguntas ni razón;
y el sol se multiplicó
por tres en los pasillos
mientras corríamos
y gritábamos,
sin miedo ni vergüenza,
ni inconsciencia,
ni control.
Y la idea de final desapareció.
Y sólo fuimos principio.